Video - La Valiente y el Amuleto del Fuego
El estruendo del volcán sacudió la tierra mientras Inara, con su capa ondeando al viento, corría por la ladera cubierta de cenizas. Los aldeanos gritaban, huyendo en todas direcciones. Inara sabía que debía llegar al corazón del volcán, donde, según la leyenda, descansaba el Amuleto del Fuego, capaz de calmar su furia. Mientras ascendía, la lava rugía como un dragón enfurecido. El calor era insoportable, pero Inara no se detendría; el destino de su pueblo dependía de ella. Con cada paso, el suelo temblaba más fuerte, pero su determinación no flaqueaba. De pronto, un rayo de luz se abrió paso entre el humo y las nubes, iluminando una cueva oculta. Dentro, el amuleto brillaba con intensidad. Inara lo tomó entre sus manos, sintiendo una energía cálida y reconfortante recorrer su cuerpo. Con un grito de desafío, levantó el amuleto hacia el cielo, y el volcán, como respondiendo a su llamada, comenzó a calmarse lentamente. La erupción cesó, y la tierra dejó de temblar. Inara regresó al pueblo, recibida por vítores y abrazos. Había salvado a su gente, y con el amuleto, aseguraría la paz para las generaciones futuras. Inara sonrió, sabiendo que su valentía había cambiado el curso de su historia.